Captando votos atacando al rival

Es hablar de política y me sube la tensión. Al final mi médico me va a prohibir tocar estos temas, pero es que ¿cómo queréis que no me ponga malo? Si es que parece que lo hagan con toda la intención del mundo. Aún espero el día en que nos den una buena noticia, porque lo de ir prorrogando la fecha en que la situación de este país mejore creo ya estamos un poco cansados.

Los candidatos: Miguel Arias Cañete (PP) y
Elena Valenciano (PSOE).

La última perla en el ámbito político de este país es la guerra cruzada entre los partidos del PP y PSOE con la publicación de vídeos atacándose los unos a los otros. Me da absolutamente igual cual de los dos fue el primero en lanzar su vídeo. Me preocupa más que estos dos partidos políticos, los que arrastran más simpatizantes, se preocupen más por debilitar al rival que mostrar cartas potentes para que la sociedad de este país pueda creer en un futuro mejor. Luego que no se extrañen si la participación en los comicios es pobre. Según un estudio del diario El País, solo acudirían a las urnas un 40% de la población. Con este panorama, ¿qué imagen queremos dar a Europa? Esta pregunta la hago para cada uno de los candidatos que se presenten a las Elecciones Europeas del próximo 25 de mayo. 

Me canso de decirlo, pero estamos ante el mayor circo político de Europa. Nos reíamos de Italia con su Berlusconi, pero es que aquí no hay ningún partido político serio. Todos miran de salvar su propio culo en vez de mirar de unir fuerzas para reflotar este país. 

Los socialistas han optado por coger la campaña contra la reforma de la ley del aborto propuesto por el gobierno de Rajoy. "Con las políticas machistas del PP y la extrema derecha europea, tu vientre ya no es tuyo. Les pertenece a ellos". Ese es el mensaje que sale en el vídeo.

En el bando contrario, los del Partido Popular en su vídeo hablan sobre las cosas que solo pueden pasar una vez en la vida: el sarampión, tener acné, sacarse el carnet de conducir, el primer desengaño amoroso... y los socialistas. Y nos preguntan: "Ahora que lo hemos pasado todo, ¿vamos a volver atrás?". Según ellos la buena dirección es la suya. De momento parece más bien que vayamos sin rumbo señores.  

En fin, el uno por el otro y la casa sin barrer. Los que salimos perdiendo siempre somos los mismos. 

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