Irónico esto del sufragio universal en este país. Porque lo de que todo el mundo con mayoría de edad tiene derecho a voto en este país, como en muchos otros, se lo pasan por el mismísimo forro. Si un inmigrante (sin menospreciar) que lleva poco tiempo viviendo en suelo español puede votar sin tener ni puñetera idea de lo que se cuece en este país, ¿cómo puede ser que más 60.000 discapacitados no pueden ir a las urnas en España? ¿Todos los casos de discapacidad son iguales? ¿Son tan inconscientes de lo que irían a votar?
Preguntas que nos hacemos cuando llegan periodos electorales en España, pero son preguntas que tienen más guasa aún si te preguntas lo siguiente: ¿Todas las personas con derecho a voto saben lo que van a elegir cuando echan la papeleta? Lo digo porque a los discapacitados les hacen pasar un test de conocimiento de política que creo que más de la mitad de la población española no pasaría. Ahora sé que nadie levantará la mano si hago la pregunta, pero venga la suelto: ¿Cuántos votáis por inercia? ¿Sabéis los programas electorales de cada partido político como para poder votar un grupo parlamentario o otro? Mucho me temo que estas respuestas, de ser completamente sinceras, dejarían el ámbito político por los suelos.
Así que por decisión de un juez, este número considerable de discapacitados no pueden expresarse en las urnas. Se les arrebata el derecho a voto, ya que no tienen el raciocinio suficiente (me pregunto yo si los jueces de España tienen todos un raciocinio correcto también, ¡viva la justicia española! ¿no?) y podrían ser presionados o intencionados por terceros. Yo me siento engañado cuando se me prometen cosas en los programas electorales y luego no se cumplen ni la mitad, ¿a quién me quejo señor juez? Porque mi capacidad de raciocinio se ve alterada cuando suceden estas cosas, vamos que me vuelvo loco y con un cabreo importante. Se nota que tengo un idilio con la política de este país, ¿no? Perdonad, pero es que me cansa este sistema incompetente que tenemos.
Hay instituciones como el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), que llevan años reivindicando una reforma de la legislación electoral en España para así impedir la incapacitación judicial sistemática para el derecho de voto de estas personas. Luchamos porque las personas con discapacidad puedan tener una vida digna y se les trate en sociedad como uno más, tendrían que tener la oportunidad de dar su opinión en las urnas. Muchos de ellos tienen una fortaleza mental y un espíritu mucho más noble que los altos cargos, corrompidos por el poder, de la política del país. Para mi hasta son un ejemplo de superación diario. Dejemos que se expresen.
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Me sorprende mucho este artículo. Naturalmente comparto la opinión, pero "eso" no funciona exactamente así, por lo menos en mi ámbito. Soy psiquiatra y forense, y los procesos de incapacitación son una parte muy importante y que valoro mucho de mi trabajo. Ciertamente ignoro el detalle de cómo se llevan a cabo en otras provincias, pero desde luego en mi demarcación eso no pasa. Las incapacitaciones se hacen a medida, una persona puede ser "incapaz" para manejar sus bienes o para bañarse sola o para desplazarse por la ciudad, pero muy capaz para conocer su propia "ideología/identidad política/...", y así consta en mis informes y así se refleja en las sentencias.
ResponderEliminarUn saludo