Hay zapatos para Rato

¿Cuántos aquí presentes quisieran lanzarle un zapato a Rodrigo Rato? El hombre que se fue de Bankia, tras dejarla en la quiebra absoluta, cobrando 1,4 millones de euros el primer año y 600.000€ el segundo estando al frente de la entidad. Un sueldazo. Bueno, se lo redujo el segundo año a consecuencia de las restricciones impuestas por el Gobierno para altos cargos de las entidades financieras. Encima, nos tenemos que tragar que el hombre hizo un gesto de buena voluntad al rechazar el finquito de 1,2 millones de euros por su marcha de Bankia. Ahora, su gestión y la fusión de 7 entidades financieras dando a luz lo que hoy es Bankia se encuentra en proceso de investigación. Viendo como va la justicia en este país no creo que le caiga ningún palo. 

¿Queréis más datos? Podéis parar aquí o seguir irritándoos. Sigo entonces. El 70% de los desahucios realizados por entidades financieras en España llevan el sello de Bankia. En si, este dato tendría que dar igual que entidad es la que realiza el desahucio. Un desahucio es un desahucio, sea de Bankia o del Banco Santander. Pero, impacta que un elevado porcentaje sea de una misma entidad. Más cuando a esta se la ha inyectado una ENORME cantidad de dinero público para salvarla. Señor Rato, ¿Va viendo a dónde quiero llegar a parar? Si, el dinero público vino, en parte, por el trabajo que aportaron en su día la gente desahuciada por el banco que nació con usted al frente. En esa época en la que ellos trabajaban (aportando su granito de arena a las arcas públicas) y se podían permitir una vivienda, confiaron en su entidad para hipotecar su vida. Y con el dinero público que podría haber generado puestos de trabajo en todo el país, van y salvan su culete y el de sus amigos. Los mismos amigos que permiten que el 70% de los desahucios sean con firma Bankia y a esos clientes que confiaron en ustedes.

Ayer, David Fernández, diputado de CUP, representó con su gesto la rabia contenida por muchos españoles ante esta situación. En medio de su comparecencia durante la comisión parlamentaria, David Fernández, encendido, se quitó la sandalia y refiriéndose a Rato dijo: ¿Sabe lo que hacen en Irak con esto(cogiendo la sandalia)? Es un símbolo de humillación y desprecio al poder del poder". Tirar un zapato se considera un insulto. Siguiendo con su discurso, el miembro de la CUP atacó verbalmente a Rato con: "¿Usted tiene miedo a que un día la gente se harte y a quedarse sin nada? Nos vemos en el infierno, que está en la calle, porque su infierno es nuestra esperanza". Finalizó su comparecencia con un "Hasta pronto gangster". Al mismo nivel casi, el representante de ICV-EUiA, Josep Vendrell soltó: "Usted pertenece a la élite carroñera y espero que la Justicia haga su trabajo".

Tras ese discurso de David Fernández, otros diputados salieron criticando su gesto y el mensaje dado. Como Duran y Lleida, de CiU, que afirmó que "es un tono a mi juicio impresentable e inaceptable. Una falta de respeto a la persona y falta de respeto al Estado de Derecho". O el portavoz de la Generalitat, Francesc Homs, asegurando que "no vas a tener en la vida más razón por chillar más, por sacar zapatos o por insultar. Lo que da la razón es tener argumentos". Puede que le fallaran las formas señores políticos, pero también puede que quisiera simbolizar el "HASTA LOS HUEVOS" que siente el pueblo con la corrupción entre política y banca de este país. Tu me rascas la espalda y yo te la rasco a ti, esto va así. 

Puede que saliera un zapato por televisión pero creo que hay muchos más en la calle mostrando el mismo sentimiento.