Ay...¡Qué gran país es China! Con tantos habitantes, será normal que salgan más noticias freaks supongo, ¿no? Este país acaba copando la sección de Rarezas en este blog.
A día de hoy aún no puedes hacer que tus hijos nazcan como tu desees, y creo que esa es la bonita magia del nacimiento. El niño/niña nace con parecidos de sus padres. Pero hay un chino indignado con el resultado del nacimiento de sus tres hijos. "Nuestra hija es increíblemente fea, hasta el punto de horrorizarme", declaró el denunciante. Me parece vergonzoso, pero de lo patético que me parece el hombre yo me río la verdad.
El protagonista de la historia es Jian Feng, quien ha solicitado el divorcio a su mujer además de denunciarla por "dar a luz a los hijos más extremadamente feos del mundo". Toma ya. ¿Cómo se deben sentir sus hijos? Deben querer a su padre con locura. Está claro que a ojos de los padres pocas veces les oiréis decir que su hijo es feo de c******, pues este hombre no solo lo dice sino que lo denuncia. Pide indemnización a su mujer por darle esos hijos horrendos. No se creía que siendo ella y él guapos pudieran salir esos 3 hijos. Así que solicitó la prueba de paternidad. Esta corroboró que si eran de los dos. ¿Hubiera preferido saber que sus hijos no eran suyos? Aliviado si, pero seria un cuernudo de los que no pasan por la puerta.
Con el resultado la mujer solo pudo confesar su secreto. Antes de conocerlo se había hecho la cirugía estética. Un cambio facial radical como veréis en las fotos. Se gastó nada más y nada menos que 100.000$ en el tunning facial. El pase por boxes le salió caro. Pero más cara le salió la broma porque su marido ganó la demanda. Viva este mundo de locos, estos chinos son la caña. Desde que crearon Humor Amarillo no me dejaron de sorprender. La mujer tendrá que pagar una indemnización de 120.000$ . Alucinante...
Entonces, la mujer se queda sola, sin marido y sin 240.000$. ¿Sin operarse habría tenido la misma suerte?
Moraleja de la historia: más vale aceptarte tal como eres, quien no te quiera por como eres es que no es tu media naranja. Más vale no esconder tu lado oscuro, porque al final todo se acaba sabiendo...
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