Hemos visto en los medios de comunicación las impresionantes nevadas que ha dejado la caótica tormenta Jonas en la costa este de Estados Unidos. Las montañas de nieve llegaban casi al metro de espesor, ¡casi nada! Puede que viendo los daños que ha causado, el mote de Snowzilla va como anillo al dedo.
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| Patrick justo a la entrada del iglú |
Pero ya lo dicen , al mal tiempo buena cara, y unos jóvenes han querido sacarle partido al montón de nieve acumulado en el jardín de la vivienda que comparten. A Patrick Horton, 28 años y residente en Greenpoint (Brooklyn), se le ocurrió jugar a ser arquitecto y junto a sus “roommates” (compañeros de piso) construir un iglú de categoría. Pusieron mantas, instalaron luz en el interior y con el subidón del resultado, pues lo ofrecieron para su alquiler en el portal Airbnb. Por un módico precio de 200 dólares la noche la gente podría disfrutar de “la escapada más deseable del apocalipsis de nieve de 2016”, tal como lo promocionaba su creador. La lástima es que la oferta fue retirada a las 6 horas al no cumplir las normas básicas para alojar personas. Dirán lo que quieran los de Airbnb, pero en esa vivienda hielo para tomarse unos cubatas no iba a faltar.
Aún así, ¡llegó a recibir 5 ofertas! Hay gente para todo amigos, y sino que se lo digan a los esquimales si se puede vivir o no dentro de un iglú. Yo como soy un poco friolero por estas fechas, me considero incompatible con una vivienda con paredes de hielo, a mi me faltaría la calefacción o una buena chimenea.
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