77.000 llamadas acosadoras

Vamos a ver, si alguien no te coge el teléfono cuando lo llamas un par de veces pueden suceder un par de cosas: la primera opción es que esa persona esté ocupada y no pueda coger la llamada en ese momento, la segunda es que esa persona no quiera hablar contigo. Cuando los sentimientos están a flor de piel es difícil controlar esa ansia por saber la razón por la cual la otra persona no contesta. Y lo digo yo, que soy impulsivo y he sufrido esa ansía por hablar con alguien. Pero lo de esta mujer es de Guinness World Record. 

Linda Murphy fue detenida en Albuquerque, Nuevo Mexico, por acosar a su ex novio. Os preguntaréis que pudo hacer la pobre muchacha. Pues bien, se ve que realizó 77.639 llamadas a su ex en tan solo una semana. Pero es que su comportamiento obsesivo además le hizo enviar 1.937 mensajes de correo electrónico (ojo al dato como diría José María García), 41.229 mensajes de móvil, 217 mensajes de voz al contestador y algo más de 600 cartas. Lo siento pero es que no veo tiempo material para poder realizar esta hazaña. Madre mía, por muy desesperada que estuviera cuando redactaba el email número 1.937 o realizaba la llamada 77.639 sin recibir una sola respuesta ¿no veía que algo no funcionaba debidamente en su cabeza?

Foto de Linda Murphy tras ser detenida.

Según leo en el portal elcomercio.es, la mujer de 28 años llegó a consumir bebidas energéticas y amfetaminas para así mantenerse despierta y seguir con su acoso a William Ryans, que fue anteriormente su pareja. 

El abogado de Ryans declaró: "Mi cliente se alivia profundamente de saber que la Srta. Murphy está finalmente entre rejas. No podía dormir, trabajar o disfrutar de la vida de ninguna de las maneras durante la última semana. Mi cliente quiere y desea que la Srta. Murphy pueda conseguir la ayuda médica necesaria". Varias sesiones creo yo que va a necesitar. Menuda loca. Aunque yo soy Williams Ryans y me cambio de identidad, no vaya a ser que cuando salga de prisión viniera a buscarme para cortarme la cabeza y colgarla en la sala de trofeos.